Varios perros procedentes de refugios participan en Compludog, una terapia innovadora de intervención asistida en educación para reducir el estrés y aumentar el rendimiento de los estudiantes universitarios en época de exámenes a través del contacto con animales.
Compludog es una iniciativa promovida por la Fundación Affinity y la Universidad Complutense de Madrid (UCM) en su facultad de Educación que permite dar «una misión muy importante» a perros que sacan de refugios y a la vez ayudar a los alumnos, según ha asegurado la responsable de los programas de terapias asistidas de la Fundación Affinity, Maribel Vila.
Maribel ha explicado que es necesaria una selección previa de los animales, en este caso Skot, Pepo y Lupi, cada uno con una personalidad diferente para adecuarse a las circunstancias de cada universitario.
Skot: ha sido adoptado con 5 semanas y tiene tres años de experiencia como perro de terapia. Ha trabajado emociones, lectura, habilidades sociales, fobias, etc.
Pepo: adoptado con un año y medio, y cuenta con cuatro años de experiencia en terapias. Ha trabajado procesos cognitivos, rehabilitación, psicomotricidad, etc.
Lupi: adoptada con año y medio, y tiene dos años de experiencia como perro de terapia. Ha trabajado procesos cognitivos, fobias, psicomotricidad...
Así, «Skot es el perro perfecto para una primera toma de contacto porque es muy cariñoso y pegajoso, mientras que Lupita es un galgo hembra que ha sufrido maltrato y es más reservada, lo que fomenta su necesidad de protección», ha explicado la profesora y codirectora del Grupo de investigación de pedagogía adaptativa de la UCM, Mercedes García, también implicada en este proyecto, que está en fase de evaluación.
Esta experiencia se ha desarrollado en tres fases –contacto, conocimiento animal y adiestramiento–, en el curso de las cuales los estudiantes tuvieron la oportunidad de tratar sus miedos y complicaciones personales mediante actividades de relajación en las que, entre otras, abrazaron a los perros y crearon vínculos «que los acompañarán de por vida», ha subrayado Vila.
Según investigaciones previas de la UCM, un 60% de los estudiantes universitarios sufren síntomas de estrés en época de exámenes, por lo que iniciativas como ésta, que el año pasado se desarrolló como estudio piloto en las facultades de Química, Sociología, Enfermería y Educación y ahora ha sido aplicada ya como experimentación, pueden ayudarles a disminuir la ansiedad.
Universidades extranjeras, como la norteamericana de Harvard o la británica de Bristol, poseen programas similares para los estudiantes de sus titulaciones.
En el caso español, el proyecto ha sido promovido por una antigua estudiante, Diana Peña, quien planteaba su trabajo fin de máster como una propuesta educativa centrada en la intervención asistida con animales.
Compludog ha sido acogido «con gran entusiasmo y sorpresa», no sólo por parte de los estudiantes, sino también por el personal universitario, ha explicado García, porque «estamos liderando algo que puede ser importante e innovador para el ámbito de la Unversidad».